
En mi viaje a Toledo me lo pasé genial y encima no nos hizo tanto calor como la gente se pensaba y lo pasamos realmente genial y no hubo ningun percance, gracias a Dios. Tuvimos mucha suerte, nos salió todo que ni a pedir de boca, encima salimos y todo y fíjate si fui detallista que le traje un queso que me habían encargado a una persona muy querida para mí, un compañero de casa y una buena persona, y no a él sólo, le traje para todos, pero a él en especial, porque me lo encargó y se lo prometí, y yo lo que prometo por lo menos lo intento cumplir, porque eso es un detalle por mi parte igual que si a mí me ocurriese algo también me gustaría que lo hicieran conmigo. ¿O no?, porque si no, ya les vale, así no se puede contar con la gente, no esperaba eso, porque eso no es así, y yo personalmente no hago las cosas con esa condición.
Bueno, lo voy a ir dejando porque ya estoy como siempre, tan pesada, y lo voy a ir dejando hasta la próxima aventura que tenga, y deseo que sea pronto. Os dejo con cariño y lástima y pena pero así es la vida, qué más quisiera yo que estarme toda la mañana escribiendo sobre mi viaje a Toledo. Y muchos más, porque yo cuando viajo siempre viajo a lugares largos porque si no no merece la pena salir de casa, ¿O no?, porque yo con de tener que madrugar para irme sólo unos tres días me quedo en casa, yo personalmente soy de las que cuando salgo de casa tiene que ser para quince días o más, y no tengo más que contaros.
Hasta la próxima aventura, que espero que sea más divertida y me la goce, incluso que me venga con un novio y todo, oye, nunca se sabe, nunca sabes lo que el futuro te puede estar esperando. En la vida basta para que no vayas a buscarle para que te aparezca sin quererlo y sin llamarlo y sin imaginarlo, es más bonita la cosa y como más emocionante y más romántico, gusta más y tan simple porque te entra ese famoso cosquilleo en el estómago, incluso por decir que ni duermes pensando en que te has enamorado de ese tío, que nada más piensas en el maldito tío, en qué hora te apareciste en mi camino, no tenía que haberte visto ni haberte cruzado en mi camino, ni nos teníamos que haber cruzado nunca, pero qué mal se pasa cuando lo pasas.
Y os dejo porque lo reconozco, que soy pesada como yo sola, y lo jodido es que lo reconozco y eso es malo, depende mucho de cada persona que uno sea y también depende de cómo uno se lo note, cada uno es cada uno, y de cómo se lo quiera tomar ese, eso es cosa de cada uno. Bueno, chao, hasta la próxima excursión, que no sé todavía mi destino a dónde será, pero ya sabéis que si yo viajo va ser a un destino largo, porque si no, vamos, que ni mando que me hagan la maleta, vamos, que ni las molesto, porque el problema mío es que yo estoy discapacitada y no me valgo por mí misma, porque yo estoy en una silla de ruedas y estoy enferma, pero yo gracias a Dios necesito ayuda pero como sola y me ayudan lo mínimo, por ejemplo a echarme a la cama, porque yo he puesto mucho de mi parte, porque si no tiro yo por mí ni Dios me iba a cuidar, y estoy sola en esta vida.
Y tener familia tengo, pero en esos casos suele pasar que te encuentras sola porque a tu familia la da asco tener que sacar a una hermana en una silla de ruedas. Pero si realmente te quiere no le da apuro, en mi caso es así, pero también habría que mirarlo del otro lado, si tú estuvieses en su lugar fijo que no tendrías verguenza, pero yo toco madera para que eso no pase ni por la casualidad de la vida. Y si pasa habrá que llevarlo lo mejor posible, qué le vamos a hacer, nos tocó, pues nos tocó, hay que llevarlo con humor porque si no te hundes en la miseria, y bastaste desgracia tuvimos que nos cayó, qué le vamos a hacer si la vida te da sorpresas, lo vamos a llevar lo mejor posible, ¿No?, vamos a asumirlo lo mejor posible, como se tenga que llevar, asumiendo las cosas. Si está de venir te viene igual, si esta de venirte te viene igual siendo humano que siendo pobre, en eso sí que no hay ni razas ni religiones, si te ha de tocar te toca igual.
Irene