El viaje famoso navarrico y me fue muy bien y mucho calor, a 28 grados a la sombra y no había quién aguantara tanto calor, era imposible dormir por la noche, era realmente imposible, no había nadie que pudiese pegar un ojo, era agobiante tanto calor, por ejemplo yo si me destapaba tenía frío y si me tapaba tenía calor. Me metí en la piscina y era un albergue que se llama Aspace Navarra y está muy bien. Se parecía a un infierno y me quedé muy contenta, pero el viaje fue muy cansado y largo, pero nada comparado con el de aquí, pero no tiene nada que hacer con el de aquí, pero me gustó mucho y si no llega a hacer tanto calor...
Y bueno, qué coño, me lo pasé muy bien, fíjate que el pobre chófer me ayudaba a ir por ahí, a desplazarme por los sitios, el pobre me ayudaba. Y fuimos a Pamplona y vi dónde se caen los toros, y es impresionante cómo se caen y los golpes que se pegan y con qué facilidad y cómo se levantan, fijo que soy yo y no me levanto tan fácilmente, porque no tengo tanta facilidad como ellos para mojar y pillar y herir. Y también nos llevaron a ver un parque que se llamaba Beatriz y estaba muy bonito.
Y bueno, me despido porque ya me pongo pesada y ya es muy hora, os dejo, ¿Vale?, y ya es hora de ir a mis asuntos, es hora ya de ir a despedirme, hasta otra historia que os cuente, ¿Vale?, espero no ser tan cansina, ¿Vale?, adiós.
Irene y sus historias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario