El regreso de Logroño

Queridos fans:

Por fin estoy de vuelta de Logroño. Nos hizo un día cachipén. Ni pensao. Me quité el antojo de patatas bravas. Y por fin fui a Logroño. Estuve viendo a Espartero e Imanol me hizo una foto y todo. Y estuvimos con su tía, que se llama Yoni, me parece. Me reí mucho con ella. Y muy guapa y muy simpática. Y la pregunté: "¿Pero tú qué eres, guía, o qué?", y ella me contesto: "Pues no". Total, que me lo pasé muy bien. Fuimos en coche nuevo, alquilado, pero nuevo. Y bonito. No me dio tiempo a traer muchas cosas, pero traje. No probé ni el vino, fíjate, y tampoco le traje al chófer bolígrafos, pero por l o menos traje algún recuerdo. Imanes. Eso sí, llegamos super rápido. El coche yo pensaba que volaba y todo. Por cierto, estuvims en el cumpleaños de su ahijada Alicia, de un año, más maja que las pesetas. Y conocí a los padres de Imanol, muy guapos. Eso. Se e hizo cortísimo el viaje.

Vi la catedral, la estatua de Espartero, que es un chico montado a caballo que dicen que mira para un lado porque mira a la casa de su esposa. Y nada más. Y comí patatas bravas, y luego venga a cervezas, venga a cervezas. Sin alcohol, claro. Por la calle Laurel. Y el agua de Logroño, que tiene como algo de vino. Que tenía que haber sido más días, la próxima vez tenía que ser de más días. Y a quién elegiré, claro, para poder disfrutar. Porque esta vez no me dio tiempo a nada. Pero lo importante es que lo disfruté.

Irene y sus llegadas.