Queridos Lectores:
Ahora tengo, otra vez, una temporada mala. Mis ilusiones se las llevó el viento, soñaba con miles de sueños pero esos sueños desaparecieron, no sé qué hacer con mi vida, no se qué pensar sobre mí, si soy una chica dulce o una niña sobrecarga. Camela es mi vida y me está haciendo feliz, me gustaría algún día que ellos supieran que están haciendo muy feliz a una niña que vive en la soledad en mi juventud. Por eso me llamo camelabea, sus canciones me calman mi vida, es un consuelo, quiero tenerlos junto a mí, poder contarles muchas cosas con cariño y admiración hacia Angeles, Dioni y Miguel Angel. Son muchas canciones y muchas historias junto a mí, es muy duro, pero como digo yo, ellos desde lejos de mí me comprenden, quiero todo lo mejor para ellos, que saquéis discos nuevos, que salgáis en la tele, en revistas. No sé qué opinaréis de mí, me encuentro triste y vacía en mi vida, ya no me consuela nadie, pongo la música, me dan energía para seguir luchando sobre mi vida.
Perdonad, lectores, creo que ese artículo es demasiado triste o llamativo, pero no puedo más, necesito gritar lo que siento, echar mi pena afuera, no soy la víctima de nadie, quiero hacer miles de cosas de gritar a la vida déjame intentarlo, no lo consigo, me pregunto ¿Por qué?. No tiraré la toalla, seguiré luchando con alegría o tristeza, con llanto o con sonrisa. Eso me viene bien escribirlo, aunque ese documento no valga nada y lo queme en la hoguera de San Juan. Siento alivio de escribirlo, tranquilidad, sin rabia, ojo, no tengo envidia de nadie porque es muy mala, te perjudica y cómo va ser mala persona porque te hace mala persona, yo no quiero eso. Deseo todo lo mejor a todo el mundo. Las puertas de mi amistad estarán abiertas, las 24 horas, para lo bueno y para lo malo.
Espero que me hagáis un comentario o crítica. Os quiero.
Un saludo de Beatriz.
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