viernes, 1 de agosto de 2008

El cha ca cha del tren


El cha ca cha del tren, del tren, del tren. Dos chicas remolcándose por el puerto pesquero, ayudándonose las unas a las otras proque no había manos suficientes y no sé le ocurrió otra cosa a Juanjo que hacer un invento que amarrarnos una silla electrónica a una manual y entonces una empuja a la otra y nos funcionó muy bien porque Carmen es una buena conductora, porque yo personalmente no me fio porque no soy cualquier persona, que yo me aprecio, me aprecio yo misma, porque si no pienso en mí, ¿Quién va a pensar en mí? Ni el Espíritu Santo, o sea, que me cuido yo misma.

Bueno, os contaré que ayer nos fuimos de comida al Barrio Pesquero, a La Gaviota, a despedir que nos vamos de vacaciones, y yo me iré a La Vega porque yo fui muy lista y me fui con ellos a Navarra, porque el viaje era más largo y a mí como me gusta mucho viajar y contra más largo sea el viaje, mejor que mejor, porque yo en cuanto hay oportunidad de viajar me encanta, porque soy una fans de viajar. Encima yo en seguida me busco la vida y con cualquiera, en seguida le doy rollo.

Bueno, ayer me lo pasé guay, encima nos vino la tuna y les pedí que nos cantaran la canción “Clavelitos”, y nosotros como la sabíamos les acompañamos. Encima vi a un exnovio mío y me vió muy guapa, porque él me conoció caminando y no ahora, que estoy en una siila de ruedas, y entonces le chocó mucho verme de una manera a verme de otra, pues le chocacaría mucho, vamos, que ni se lo imaginaba él después de tanto tiempo, verme así. Es que hacía que no nos veíamos igual hace ocho años o más de tiempo.

Y con esas, queridos lectores, ya os dejo hasta la próxima aventura que me vuelva a suceder, y otra cosa, ya os contaré mi viaje a Dueñas, que también me voy. Bueno, me voy y hasta otra ocasión.

Irene

No hay comentarios: