El 23 de mayo, jueves, se me cumplió el sueño hecho en realidad, durante 5 años ya llevo dando charlas de voluntaria de Cocemfe-Cantabria a todos los colegios de Cantabria. Siempre he deseado ir a mi colegio, donde entré a los 6 años y salí a los 16 años, al cual, lo recuerdo con mucho cariño: A mis compañeros, a mis profesores, al director, a mis profesores de apoyo, al jefe de estudios, mi fisio, mis logopedas, a las profesoras de prácticas, a las cuidadoras, etc...
Repetí sólamente un curso 4º de E.G.B, hice hasta octavo, conocí a mis compañeros de clases, me hice amiga de ellos. Me ayudaban mucho, usaba un andador para caminar algo pero después con mi silla. Siempre cuando me daban las notas de evaluación cada tres meses, siempre me la firmaba mi padre. Después, a los 17 años que dejé el colegio Numancia, desde que llevo dando charlas, siempre he deseado ir a mi cole.
Cuando me lo dijo Rosa, que teníamos que ir a dar una charla a varios cursos, porque dimos varias clases, no me lo podía creer. Pero me dijo que ese día no podía llevarme la furgoneta. Se lo comente yo, voy por mi cuenta, es decir yo sola desde casa hasta el colegio y de allí, cuando acabamos, me iba a mi centro de Amica. Así, lo hice, para que mi sueño pudiera cumplirse y se cumplió.
Cuando me tocó hablar a mi estaban los niños, estaba mi director y mi profesora Teresa, la cual me dio clase 3 años: tercero, cuarto y quinto de E.G.B. Para mí era muy especial ese día, recordé toda aquella época, además fui a una de la clase que estuve yo. Se me vino todo el recuerdo que yo he vivido, recuerdos maravillosos que nunca puedo olvidarme.
Presentamos en un powerpoint con fotografías todo lo que hacemos en Cocemfe-Cantabria con los niños. Quedé allí con mis compañeros de las charlas de Cocemfe. Después hablamos un poco de cada una, de nuestras patologías. Los niños nos hacían preguntas, también había personas cercanas a ellos con una discapacidad o se habían fijado en la calle al pasear.
Le enseñamos como deben de tratar a un invidente en la calle, siempre tenemos que preguntar, por ejemplo, si quiere que le ayude a cruzar, igual no va a cruzar, simplemente está esperando a alguien y sin decirles nada le cogen del brazo y le llevan de manera que no es correcta y le cruzan, lo que hacen es desorientarles. Por eso siempre debemos preguntar y por ejemplo, si no quiere que le ayude, hay que respetarle porque es su decisión.
Beatriz
Repetí sólamente un curso 4º de E.G.B, hice hasta octavo, conocí a mis compañeros de clases, me hice amiga de ellos. Me ayudaban mucho, usaba un andador para caminar algo pero después con mi silla. Siempre cuando me daban las notas de evaluación cada tres meses, siempre me la firmaba mi padre. Después, a los 17 años que dejé el colegio Numancia, desde que llevo dando charlas, siempre he deseado ir a mi cole.
Cuando me lo dijo Rosa, que teníamos que ir a dar una charla a varios cursos, porque dimos varias clases, no me lo podía creer. Pero me dijo que ese día no podía llevarme la furgoneta. Se lo comente yo, voy por mi cuenta, es decir yo sola desde casa hasta el colegio y de allí, cuando acabamos, me iba a mi centro de Amica. Así, lo hice, para que mi sueño pudiera cumplirse y se cumplió.
Cuando me tocó hablar a mi estaban los niños, estaba mi director y mi profesora Teresa, la cual me dio clase 3 años: tercero, cuarto y quinto de E.G.B. Para mí era muy especial ese día, recordé toda aquella época, además fui a una de la clase que estuve yo. Se me vino todo el recuerdo que yo he vivido, recuerdos maravillosos que nunca puedo olvidarme.
Presentamos en un powerpoint con fotografías todo lo que hacemos en Cocemfe-Cantabria con los niños. Quedé allí con mis compañeros de las charlas de Cocemfe. Después hablamos un poco de cada una, de nuestras patologías. Los niños nos hacían preguntas, también había personas cercanas a ellos con una discapacidad o se habían fijado en la calle al pasear.
Le enseñamos como deben de tratar a un invidente en la calle, siempre tenemos que preguntar, por ejemplo, si quiere que le ayude a cruzar, igual no va a cruzar, simplemente está esperando a alguien y sin decirles nada le cogen del brazo y le llevan de manera que no es correcta y le cruzan, lo que hacen es desorientarles. Por eso siempre debemos preguntar y por ejemplo, si no quiere que le ayude, hay que respetarle porque es su decisión.
Beatriz
2 comentarios:
una gran maestra y un gran ejemplo para todo el mundo Yo la daria un premio por la labor de igualdad que esta realizando
Gracias, pero yo hago lo que puedo al igual que mis compañeros de esta campaña.
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